Alcaldesa del Reino Atavillos

Ella se llama Martha Baldeón Remuzgo, y llegó a buscarnos un día, sin anunciarse, sin rangos ni posición política. Nunca supimos que era la alcaldesa de un distrito limeño con mucha historia. Preocupada por su reino, por los avances tecnológicos que el mundo globalizado estaba alcanzando, no obstante de estar muy cerca de la capital peruana, unas horas de Huaral, el atraso no podía darse en su distrito. 

Un mes antes que asuma su mandato, ya estaba preocupada por el tema de las comunicaciones en su distrito. No habían medios, pocos servicios celulares y sin datos, su distrito estaba totalmente aislado y sus anexos, ni hablar. Lo primero que hizo fue buscarle una solución. No le importaba si tendría que ir a gestionar a donde fuera, o cuanto esfuerzo costara implementar su conectividad, pero en el primer semestre del primer año de su periodo en el gobierno, lo ha logrado.

Nadie supo que ella era la flamante Alcaldesa de Atavillos Alto, en la Provincia de Huaral, las alturas de Lima Provincias. Nadie supo hasta que se le preguntó. Nunca nos dijo humildemente que estaba gestionando su internet para sus comunidades ancestrales y vecinos anexos, centros poblados milenarios. Hoy cuenta con Internet satelital de alta velocidad con mas de 20 megas en 2 de sus antenas ubicadas en su capital Pirca y en el anexo de Baños, de mucha importancia distrital. 

El distrito de Atavillos Alto, fue uno de los primeros distritos de la sierra limeña que contó con satélite y un equipo Chasqui Router para el tema educativo. 

Hoy con Internet Satelital de HughesNet de alta velocidad y equipos www.chasquirouter.com, puede promover muchas cosas que nunca se pudo hacer antes. Transmisiones en vivo, de sus eventos culturales, milenarios, ferias agropecuarias, eventos comunitarios. Ella está haciendo uso de las tecnologías de información, justamente para eso, Informar al mundo lo que es ser un Atavillano. Pronto con su página web que está elaborando, va a proponer al mundo una nueva ruta turística, muy cerca a Lima, la capital.

La historia de su distrito está plenamente ligado a la historia del Reino de los Atavillos, que se desarrolló entre los años 900 y 1400 en las alturas del actual Huaral, siguiendo la cuenca del río Chancay; y a no mas de 150 Km. de Lima capital; en etapa inicial de la historia universal denominada "Edad de Bronce".

Esta cultura tiene sus orígenes en las cercanías del Lago Titicaca y se estima que llegó a la zona de Huaral como parte de la expansión del imperio Huari-Tiahuanaco. Al decaer este imperio, el antiguo Perú quedó dividido en diversos señoríos, siendo los Atavillos uno de ellos. Estos tuvieron como vecinos posiblemente a: los Cantas y los Yauyos por el sur, los Huancas por el este y, los Chancay al norte y oeste.

Otras versiones afirman que el Reino de los Atavillos no tienen su origen en el Imperio Huari-Tiahuanaco, sino en: "los Yauyos", hijos de Pariacaca (Jacaru). Y fue el valeroso guerrero: Macahuisa, el que sometió definitivamente para el Inca Pachacutec, a los pobladores de los valles del: Rímac, Chillón y el Chancay, que los mantuvo en jaque, al poderoso ejército imperial incaico, por mucho tiempo. El inca Pachacutec, en agradecimiento a Macahuisa (Yauyos), divide los territorios sojuzgados en base a los humos, a los que llamará: Hatun Yauyos (provincia de Yauyos), Hanan Yauyos (provincia de Huarochirí) y Urin Yauyos (provincia de Canta) en donde se ubica los reinos de los Atavillos, y todo este territorio fue controlado por Macahuisa, es decir, los Yauyos. Lo que finalmente haría que los Atavillos fueron conquistados indirectamente por el Inca Pachacutec cerca al año 1400.

En la colonia; los Atavillos fueron divididos en "Altos" y "Bajos" según su posición respecto a la cuenca del río Chancay e incluyeron dentro de los "Atavillos Altos" a los pobladores de Cantamarca y sus alrededores (en el actual Canta), vinculados a la parte alta del río Chillón; que corre paralelo  al río Chancay. Los Atavillos ocuparon la cuenca del río Chancay; construyeron sus cullpis hasta de 10 metros de altura con varios pisos y con una base de forma rectangular; sus techos fueron construidos con vigas de piedras apoyadas directamente en sus paredes externas, sin columna central, por lo que la distancia libre y útil para caminar supera en muchos casos los cuatro metros.

Cantamarca es una ciudadela, El Dr. Francisco Aparicio, director del Museo Etnográfico de Buenos Aires, exclamo: “todo es típico, todo es singular, todo es admirable. La ingeniería y la arquitectura representan en aquellas obras seculares un elevado concepto de cultura”. Lo típico, lo singular, lo admirable de las construcciones de la ciudadela legendaria es su estructura anillada o circular con pilastras en forma de cono invertido.

 

Añay es un castillo megalítico, Lo singular aquí es el corte trapezoide de sus edificios. La sillería de sus bastiones, así como sus terrazas que se afirman sobre roca viva, no tienen paralelo entre las culturas prehistóricas de aquella región. La obra más importante y única es un hemiciclo con 144 portadas trapezoidales y una serie de graderías horizontales con capacidad como para cinco mil personas.

 

Rupac es una necrópolis suntuosa Está mejor conservada y ofrece líneas ornamentales de alta y refinada concepción. Las construcciones de la colina se encuentran como si no hubieran transcurrido mas de veinte siglos: hermosas, esbeltas, altivas. Los templos funerarios son pentagonales.

 

Chiprac es una soberbia metrópoli Tiene mas de dos kilómetros de extensión. Su atalaya es gigantesca montaña de Manco Capac, que cubierta de nieve con una aureola de rubí crepuscular, esta batiendo a todos los vientos la bandera del Perú como símbolo y expresión eterna de gloria y de grandeza.

VALIOSOS TESOROS ARQUEOLÓGICOS 

El primer congreso Nacional de Turismo, reunido en Lima en Junio de 1947 acordó por unanimidad, recomendar al Patronato Nacional de Arqueológica que “atienda a la conservación de las ruinas precolombinas de Cantamarca, en la ruta Chillón y las de Chiprac, Rupac y Añay, en la ruta de Chancay, que son valiosos tesoros del patrimonio arqueológico nacional”. Estas ruinas tienen su origen en la época arcaica y constituyen la expresión más admirable de la cultura lítica de los Andes del Perú.

Se trata de construcciones monumentales cuya arquitectura ha seguido el corte piramidal de las cumbres. Cada piedra labrada es interrogación. Nada hay que no invite a una seria meditación para dominar un vasto panorama de tiempos pretéritos y un amplio horizonte de belleza incomparable. Fácil es pensar, lo difícil es escalar riscos inexpugnables, que parecen nidos de cóndores, castillos megalíticos, almenas feudales, atalaya de cíclopes. El abismo y la cumbre son los argumentos eternos del drama de una raza que forjó su cultura con genio creador venciendo al tiempo y a la naturaleza. Los estilos de las construcciones son característicos. Un signo de individualidad y gerandeza marca la distancia entre una época y otra con todos los cánones del arte.

CARACTERÍSTICAS IMPORTANTES

  • Construcciones hechas en su totalidad de piedra.
  • Uso de los kullpi, para sus sepulcros.
  • Edificaciones de dos niveles.
  • Ubicados a mas de 3000 m.s.n.m.
  • Adaptabilidad a la topografía de su entorno.
  • Construcción de acueductos para época de sequía.
  • Los caminos para llegar son muy angostos y en pendiente pronunciada, es decir una accesbilidad dificultosa.
  • Dedicados a la agricultura y a la crianza de animales.
  • Fueron invadidos o conquistados por los Incas.
  • Debido a su ubicación se podían proteger de sus enemigos.
  • Poseían una gran defensa militar.
  • Kullpis de planta rectangular y circular.
  • Los techos podían ser abovedados y de pilastras rectangulares con su capitel y falsa bóveda.
  • No todas las unidades arquitectónicas de esta cultura poseen un buen estado de conservación.
  • Se ubicaron cerca a los ríos Chillon y Chancay, debido a lo cual recibieron los nombre de Atavillos Bajo o de Atavillos Alto.

SELECCIÓN DEL EDITOR

DE INTERÉS...

POST GALLERY